Homenaje a la revista _ Punto seguido : Cuarenta años (1979-2019)

COMO HACER AGUJEROS EN EL AGUA

Por: Beatriz Gómez (19-)

Ellos no escriben una revista que llama Punto Seguido porque no quieren llegar a ningún punto. Ellos la viven aquí en Medellín. Primero se la introducen en la piel y luego se restregan el alma con ella hasta lograr una sustancia que obcecadamente desea ser compartida. Después de mucho deambular por las venas de los noctámbulos, esta pequeña energía loca y juguetona logra acomodarse en una serie de 10 hojas amigas, tamaño octavo, cuyo mayor oficio es recostarse la una sobre la otra para saborearse los poemas y las imágenes que lo complementan. La revista es nuestro enamoramiento. Vivimos por el arte, por la poesía y por eso queremos morir. Punto Seguido es un camino que tiene corazón, es una forma de vivir. Esta constancia es una poesía al aire que libre lanzada por cuatro “cameladores” que dicen llamarse Luis Fernando Cuartas, John Sosa, Jesús Rubén Pasos, Miguel Ángel Puerta y Jorge Valencia (corresponsal en Estados Unidos debido a un exilio voluntario). Cada segundo de sus vidas le pertenece a la revista Punto Seguido, la cual se ha llevado el punto de sobrevivir a pesar de los bofetazos y de los muros que se tejen alrededor de aquellas cosas que toman el sendero de lo insospechado. Pues bien, toda esta obsesión poética por lo imposible, empezó a gestarse hace algunos años cuando John Sosa y Rubén Pasos decidieron trabajar algunas cosas simples, rudimentarias, poesía y pequeños cuentos, en unas modestas hojitas de mimeógrafo. Con el tiempo, estas hojitas querían crecer y multiplicarse y allí nació Punto Seguido, con un logotipo que se los diseñó gratis un caricaturista amigo. Inicialmente, el objetivo era hacerlo muy de  provincia, con algunos muchachos amigos de la poesía. Imagínese que los primeros números fueron hechos con ventas de periódicos viejos. Los vendíamos kiliados, cargándolos en carretillas y llevándolos a Guayaco. Una vez, un compañero que trabajaba en un banco, tenía grandes cantidades de papel viejo y con eso hicimos una venta de 20.000 pesos. Y no nos gastamos ni una cerveza para celebrarlo. Nosotros hemos sido un club de deudores de las litografías, pero acreedores del corazón y del espíritu.

En cinco años de vida, Punto Seguido, ha salido a escena 18 veces, con una inversión de más de 300.000 pesos y con una deuda actual de 28.000. Hasta la prima navideña de uno de los compañeros del grupo ha estado comprometida en esta publicación, porque ellos se empeñan en no conseguir patrocinios ni mecenazgos. Son 18 números que han albergado en sus páginas vivencias, asuntos y personas que caminan por diferentes cielos para encontrarse en un Punto: la locura, el erotismo, la poesía disparatada de los niños, la muerte, el poder, el pensamiento de la mujer moderna, García Lorca, León de Greiff, Ñito Restrepo, los romances de la época pre-revolucionaria de Galán, la poesía negra, Cavafis, Barba-Jacob, Antonin Artaud, Rilke, los mitos en Antioquia, Pink Floyd, Chico Buarque y la cantidad de colaboraciones que reciben de todas las partes del país.

Portada del Asombro

Para nosotros siempre ha sido importante la portada de Punto Seguido. Las portadas son como una invitación a que la gente siga, como un puente que se le abre al lector. Queremos que nuestra portada sea la imagen que reúna la intención de cada número, que evoque en la gente muchos significados, que asocie la revista con su propia realidad, de una manera vital. Que esa imagen que colocamos ahí trastoque otras realidades interiores.

Punto Seguido se vende a 30 pesos y el último tiraje fue de 1.500 ejemplares. Esta revista ha sido muy andona, pues se la pasa recorriendo universidades, colegios, sindicatos y pueblos. Sólo se ve quietecita cuando está exhibida en la sucursal de la librería Científica. No contenta con esto, la revista se ofreció como material de estudio de algunos profesores de literatura y punto de encuentro de muchos cómplices y adictos a la poesía. Cuando Punto Seguido cumplió los cuatro años, uno de sus editoriales logró, uno de sus editoriales logró resumir su búsqueda permanente, su irrupción en lo cotidiano con miradas refrescantes para apalear el marasmo visual. Quizás un desabrido anhelo de insurgencia, un temblor de abismos en el alma o la música oculta que vibra en las tinieblas nos llamó a publicar Punto Seguido. Lo cierto es que a cuatro años de labor este tributo propio no es menos desgarrado que la antigua soledad de los comienzos. De un tiempo acá, esta aventura incorregible se ha cargado de risa, de plutónico miedo, de locura y resistencia. Nada de prodigio, de dioses tutelares. Ha sido como abrir agujeros en el agua.

Cábala poética

La revista nos ha servido para descubrir y descubrirnos a nosotros mismos, esencias de pensamiento, contenidos humanos. Nosotros somos cuatro, y cuatro representa el cuadrado perfecto. Entre nosotros hemos encontrado los cuatro elementos de la naturaleza.

Miguel Ángel Puerta representa el Aire. Él es un teatrero que nuca está con los pies en la tierra… anda en zancos, al menos en escena. Su literatura favorita es la ciencia ficción, la cosmología y los astros. Originalmente, Miguel Ángel quiere decir el ángel desterrado, aquel que deseaba igualarse a Dios. Todas sus imágenes son aéreas y difusas. Actualmente estoy construyendo un globo y un aeroplano. En este momento estoy un poco más arriba de la atmósfera porque uno empieza a perder elementos que lo atan a la tierra.

Jesús Rubén Pasos es apenas un seudónimo, que tiene que ver con el Agua. Él trabaja con la música, la cual posee una estrecha relación con el agua. Él es noctámbulo y aboga por la inmersión en lo impenetrable de la noche, del tiempo. Siempre sueña con aguas que están en constantes caídas y levantadas, aguas violentas. Es originario de Emaús, está reconstruyendo la barca de Noé y su apellido Pasos es por aquello de dejar huellas. Mantengo una obsesión: la persecución de una mujer decapitada de botas azules. Ella es mi fantasma.

El elemento Tierra está a cargo de Luis Fernando Cuartas. Me identifico con esa frase de Kafka: el gran trapecista no necesita una cuerda en el aire para poder andar. Le basta con saberse arrastrar, conocer la tierra. Pretendo vivir de ese poco de planeta tierra que nos queda. El busca la concreción, las imágenes pesadas: piedra, hierro, poesía de tipo citadino, donde la ciudad se desmorona y la tierra recobra su lugar. El fuego está recostado en el interior de John Sosa. Vengo de Babilonia y tengo mi corazón en la Edad Media. Soy hijo de algún sacerdote perseguido de esa época. Uno de sus trabajos poéticos es hacer cometas. Le obsesionan las acciones de la guillotina y la horca. Su poesía tiene que ver con lo místico, con lo religioso. Se rige por las fases de la luna, como los antiguos bailarines. Mi culto es por la diosa blanca, la Luna.

Punto Seguido mantiene correspondencia con Argentina, Suecia, Panamá, Costa Rica, Nicaragua, México, Estados Unidos, Honolulú, lo cual les permite mantener un archivo muy extenso que se compone de folletos, revistas y documentos de un inocultable valor literario. En cierta ocasión les llegó una carta del Juez Promiscuo de Sibundoy (Putumayo) y otra carta del subdirector de la cárcel de Valledupar.

Estos oficiantes de la fantasía ya están preparando el No 19 de Punto Seguido. Vamos a romper la barrera de la literatura, de lo estrechamente literario. Ya no se trata de mostrar aquellos textos que tradicionalmente han sido considerados como poéticos. También existen otras personas que nos hacen sentir aunque no hayan sido tenidos en cuenta como poetas. Por ejemplo, Paracelso, que era un místico alquímico, pero en lo que dice hay poesía. El número 20 estará dedicado a la ciencia ficción, haremos un homenaje al cometa Halley. Hemos descubierto poemas cibernéticos, elaborados a través de la combinación de números y palabras, por medio del computador. Punto Seguido desea sacar adelante tres ilusiones imposibles: el Encuentro Mundial de la Imaginación, el Encuentro Nacional de revistas, suplementos literarios y pequeños editores. Y para rematar, un viaje a Brasil, a descubrir sabe Dios qué nuevas bohemias. Después de Punto Seguido se comienza con mayúscula y ¡punto!

Dominical. El Colombiano. Julio 22 de 1984. Págs. 12-13.

Fuente: https://lamecanicaceleste.wordpress.com/2019/01/11/homenaje-punto-seguido-cuarenta-anos-1979-2019/?fbclid=IwAR0p5dLNZQRpM8Y4bgHpdBkBvMaEGmwb0F8a0E9DNwLdz1M8ZMBWjAgXIYE