domingo, 31 de julio de 2016

Biografia de Álvaro Mutis

(Álvaro Mutis Jaramillo; Bogotá, Colombia, 1923 - Ciudad de México, 2013) Escritor y poeta colombiano. Autor destacado por la riqueza verbal de su producción y una característica combinación de lírica y narratividad, participó en sus inicios del movimiento de poetas agrupados en torno a la revista Mito. Influido por Pablo Neruda, Octavio Paz, Saint-John Perse y Walt Withman, empleó la poesía como vía de conocimiento para el acceso a universos desconocidos, a nuevos mundos donde fuese posible el amor y la buena muerte. Su álter ego es Maqroll, un aventurero sombrío y a la vez inocente, que canta a la frágil condición humana. Su obra fue reconocida con galardones tan prestigiosos como el Príncipe de Asturias (1997) y el Premio Cervantes (2001).

Álvaro Mutis
Hijo del abogado internacionalista Santiago Mutis Dávila y de Carolina Jaramillo, en 1925 su padre ingresó al servicio diplomático y la familia hubo de trasladarse a Bruselas, donde el jefe de familia había sido nombrado ministro consejero. En Bélgica nació, en 1928, su hermano Leopoldo, y en 1931 murió repentinamente su padre. La afligida madre retornó a Colombia y se instaló en la finca Coello (ubicada en la confluencia de los ríos Coello y Cocora, en el departamento del Tolima). La finca había pertenecido al abuelo materno, el pionero Jerónimo Jaramillo Uribe, uno de los fundadores de Armenia, y doña Carolina acababa de heredarla. Mutis permaneció en Bruselas estudiando en el colegio Saint Michel de los padres jesuitas, en el que se empapó de conocimientos históricos, muy especialmente sobre Bizancio.
La finca Coello, y en general Colombia, representaron en esos años para Mutis un sitio de vacaciones. Sin embargo, la experiencia del contacto físico con el trópico, con el clima de la tierra caliente, el aroma del café, el plátano y los árboles frutales marcarían su posterior producción literaria. Pese a que para Mutis el mundo era Europa, los reiterados viajes en barco a Colombia (en pequeños buques de carga y pasajeros, que llegaban a Buenaventura tres semanas después de zarpar, al cabo de las cuales había que desplazarse en automóvil, tren y caballo hasta el hogar materno) fueron otra experiencia fundamental en la formación del escritor. No es raro, entonces, encontrar que el personaje principal de las novelas de Álvaro Mutis, Maqroll el Gaviero, se debata entre ciertas contradicciones, viva entre Europa y América, en mundos totalmente contrastantes, considere el Viejo Continente como la cuna de la civilización y al Nuevo Mundo como la fuerza, y que, insatisfecho con uno y otro, intente crear en sus aventuras un universo acorde con sus ideales.
Álvaro Mutis no acabó el bachillerato. Por problemas financieros de su madre, hubo de abandonar el colegio en Bruselas y se matriculó en el Colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario en Bogotá. Pero no le interesaba estudiar el pensum regular; le gustaba leer libros de historia, de viajeros y de literatura, y no le preocupó aprender matemáticas y otras minucias. En 1941, con sólo dieciocho años, prefirió casarse con Mireya Durán, con quien tendría tres hijos.
Como muchos de los grandes escritores contemporáneos, cumplió un exigente periplo de lecturas formativas que se inició con Julio Verne y Emilio Salgari, pasó por Honoré de Balzac y Flaubert y por los maestros rusos (Dostoievski, Tolstoi, Chéjov) para terminar, en esa primera etapa, con Kafka, Werfel y Rilke. De los latinoamericanos también leyó mucho, pero quien más lo conmovió fue Pablo Neruda con su Residencia en la tierra. En el Colegio del Rosario tuvo como profesor de literatura a Eduardo Carranza, quien le enseñó la importancia de poetas como Juan Ramón Jiménez y los españoles de la generación del 27.
Una vez casado, y para ganarse la vida, se vinculó a la radio. Inicialmente, en 1942, trabajó en la emisora Nuevo Mundo, que con los años se convirtió en la matriz de la Cadena Radial Colombiana, Caracol. Allí reemplazó a Jorge Zalamea en la dirección del programa "Actualidad literaria". Se relacionó con el mundo intelectual y bohemio de Bogotá y conoció al crítico Casimiro Eiger, a quien Mutis agradecería el facilitarle la entrada en el mundo de las letras. Este misterioso personaje escapado de las obras de Proust ejerció cierto papel tutelar en la joven intelectualidad de entonces, similar al que cumplió Ramón Vinyes en el Grupo de Barranquilla.
Se hizo también amigo de los críticos y escritores Hernando Téllez y Eduardo Zalamea; frecuentaba los tradicionales cafés El Molino, El Asturias y El Automático, donde se acercó a dos generaciones distintas de poetas: los Nuevos y los de Piedra y Cielo. Conoció además a los hermanos Otto y León de Greiff, el primero de ellos muy importante en su formación como melómano. En 1942 fue contratado por la Radiodifusora Nacional como locutor de noticias, actividad en la que permaneció hasta 1946, cuando la Compañía Colombiana de Seguros lo nombró jefe de redacción de su revista institucional, Vida; allí aparecieron sus primeros escritos: pequeños retratos literarios de Joseph Conrad, Alexander Pushkin, Antoine de Saint-Exupéry o Joachim Murat. Y también su primer poema, titulado "La creciente".
Durante esa época tuvo un acercamiento importante a los surrealistas: Saint-John Perse, traducido por Jorge Zalamea, André Breton y su Poisson salubre. Este último fue determinante en sus primeros poemas, pues quiso ser surrealista, al punto que sus versos iniciales los iba a titular "La cebra perfumada". También recibió la influencia del poeta venezolano Juan Sánchez Peláez, agregado cultural de la Embajada de Venezuela en Bogotá, quien lo llevó a un mundo mágico, a un vocabulario deslumbrante. En 1947 conoció al poeta guatemalteco Luis Cardoza y Aragón, que era el embajador de Guatemala en Colombia, y a los pintores Fernando Botero y Alejandro Obregón.
El año siguiente se hizo amigo de Ernesto Volkening, quien, al igual que Casimiro Eiger, cumplió un papel importantísimo en el periplo literario de Mutis. Eiger conoció fragmentos de la obra de Mutis y lo animó a publicar algunos textos en el suplemento del periódico La Razón, que dirigía Alberto Zalamea. Por ese entonces existía el grupo de los Cuadernícolas, el cual, aunque no era homogéneo, gustaba de publicar sus versos en cuadernos. Mutis siguió la moda y, junto con Carlos Patiño Roselli y alentado por Volkening, publicó el cuaderno de poesía La balanza, con ilustraciones de Hernando Tejada, que se agotó por incineración el 9 de abril de 1948. El cuadernito recibió algunas críticas y Mutis esperó cuatro años para publicar su segundo libro: Los elementos del desastre, que por su frescura y pureza conmovió el mundo de las letras colombianas.
El trabajo consta de catorce poemas que configuran una visión apocalíptica del hombre, en los que se muestran la duda, el miedo y la destrucción, elementos que aniquilan al ser humano. Este libro contó con la lectura crítica de Volkening y con él se configuró Mutis como el principal poeta joven colombiano. Mientras se consolidaba como escritor, inició una importante carrera como relacionista público y publicista pues, desde un comienzo, comprendió que con la literatura no iba a percibir mayores ingresos. Fue director de publicidad de la Compañía Colombiana de Seguros y de Bavaria, jefe de relaciones públicas de Lansa, y, tras la quiebra de esta última compañía, pasó a ser en 1954 jefe de relaciones públicas de la Esso. Tales empleos le obligaban a viajar, con lo que conoció todo el país y parte del mundo. Muchos de sus poemas de esa época los escribió en aviones, aeropuertos y cuartos de hotel.
Los dos años que permaneció en la Esso fueron de casi total receso literario; sin embargo, Maqroll el Gaviero nació de las experiencias de Mutis en los planchones petroleros que recorrían el río Magdalena, desde Barrancabermeja hasta Barranquilla. Cabe destacar que Gaviero es el marino que desde el sitio más alto del barco vigila por todos los demás; su símbolo para el oficio de la poesía. En la Esso, Mutis manejaba importantes cantidades de dinero que la compañía destinaba a diferentes actividades: un buen porcentaje era para obras de caridad, y muy especialmente para el Secretariado Nacional de Asistencia Social (SENDAS). Pero el poeta le dio un uso distinto: lo invirtió en quijotescas empresas culturales y la compañía lo demandó, pues estaban en juego sus relaciones con la dictadura. Mutis tuvo que viajar con urgencia a México en 1956.
Era la segunda ocasión que visitaba ese país (la primera había sido en 1952) y desde entonces se convirtió en su lugar de residencia. Entró en contacto con el gran cineasta español Luis Buñuel y el productor Luis de Llano. Buñuel siempre soñó con llevar al cine la novela de Mutis La mansión de Araucaíma (1973), "relato gótico de tierra caliente". Gracias a ambos, Mutis consiguió empleo en una agencia de publicidad para la televisión. Se vinculó de lleno a la vida cultural mexicana y se hizo amigo de los escritores Octavio Paz, Juan José Arreola, Juan RulfoCarlos Fuentes yElena Poniatowska.
No perdió los lazos con Colombia, pues esporádicamente colaboró en la revista Mito. En 1959, la prestigiosa revista publicó como separata el libro Reseña de los hospitales de ultramar, que significó la aparición en el mundo de las letras del romántico personaje de Maqroll el Gaviero, que viene a encarnar la conciencia del poeta. En 1959 se hicieron efectivas las demandas en su contra y fue recluido en la cárcel mexicana de Lecumberri durante un año y tres meses. Una nueva experiencia para su formación como escritor, pues, además de conocer la poco gratificante vida carcelaria, logró superar miedos y fantasmas. De ese período de su vida es necesario resaltar la disciplina que tuvo en devorar libros; leyó por segunda vez los siete volúmenes de En busca del tiempo perdido, de Marcel Proust, de quien tenía un retrato en su celda. Dio forma a los relatos "Saraya", "El último rostro", "Antes que cante el gallo" y "La muerte del estratega", a algunos poemas de Los trabajos perdidos (1965), y escribió el Diario de Lecumberri (1960), resultado directo de su estadía en la cárcel, en el que narra, de manera conmovedora, la vida y muerte de "Palitos". El libro fue publicado por la Universidad Veracruzana.
Tras la cárcel, algunos años después, Mutis pasó a ser gerente de ventas para América Latina de la Twentieth Century Fox y luego de la Columbia Pictures (en donde permaneció hasta jubilarse en 1988), empresas que le permitieron seguir viajando por el mundo. Entre 1960 y 1973 es relativamente poco lo que hizo en literatura: en 1962 publicó cuatro textos con el seudónimo de Álvar de Mattos (diplomático portugués) en la revista Snob, dirigida por Salvador Elizondo y Emilio García Riera: "Pequeña historia de un gran negocio", "Historia y ficción de un pequeño militar sarnoso", "El general Bonaparte en Nizza" y "El incidente de Maiquetía o Isaac salvado de las jaulas". En 1964, en la Casa del Lago de la Universidad Nacional Autónoma de México, dictó una serie de conferencias dedicadas a sus devociones literarias: Valéry Larbaud, Joseph Conrad y Marcel Proust. Tales conferencias serían publicadas ese mismo año en la revista de la UNAM, dirigida por Jaime García Terrés.
En 1965 se publicó su libro Los trabajos perdidos, con el que obtuvo el Premio Nacional del nadaísmo para poesía de ese año. Entonces ya era considerado el mejor poeta colombiano del momento, aunque, definitivamente, su visión de la literatura y del país era sumamente pesimista. Decía, por ejemplo, que "la literatura es para mí una servidumbre dolorosa, y no siento por ella la menor simpatía. Me abruma un poco, por ejemplo, la agobiante montaña de literatura que producimos los colombianos y que nos oculta en muchos casos la miserable realidad de nuestra situación ante el mundo". Su enfoque sobre la violencia fue descarnado y realista: "La violencia en Colombia es el resultado de las seculares represiones e inhibiciones a que se ha visto sometido el colombiano por razones históricas y sociales. Como fenómeno me parece sano y recomendable, es un despertar. Todas las civilizaciones se han basado en sacrificios humanos, en violencia, en humillación y en sangre. ¿Por qué los colombianos creímos estar libres de esta servidumbre? Tal vez por retóricos y artificiales nos creímos de veras que éramos la Suiza de América. No hay que olvidar que los suizos llenaron de sangre a Europa como soldados mercenarios antes de formar su idílica confederación".
En 1973 se publicó en España Summa de Maqroll el Gaviero (1947-1970) que contenía las obras Primeros poemasLos elementos del desastreLos trabajos perdidosReseña de los hospitales de ultramar y Recuento de ciertas visiones. En 1977 inició la columna semanal "Rincón Reaccionario" en el periódico Uno más Uno, que después continuó en El Sol de México y en el diario Novedades. En 1978, se publicó una segunda edición de La mansión de Araucaíma, junto con los cuatro relatos escritos en la cárcel.
Sólo en 1982 volvió a aparecer un nuevo libro de poemas de Álvaro Mutis:Caravansary, que publicó el Fondo de Cultura Económica; ese año su gran amigoGabriel García Márquez, a quien había conocido en 1950, ganó el premio Nobel de Literatura. Mutis, junto con otros amigos mutuos como Guillermo Angulo, Álvaro Castaño Castillo y Gloria Valencia de Castaño, Alfonso Fuenmayor, Gonzalo Mallarino, Alejandro Obregón, Hernán Vieco y Fernando Gómez Agudelo, fueron invitados especiales del autor de Cien años de soledad a la ceremonia de entrega del Nobel en Estocolmo. Al año siguiente se le concedió en Colombia el Premio Nacional de Poesía.
Tras el premio, la trayectoria literaria de Álvaro Mutis siguió en ascenso. En 1984 el Fondo de Cultura Económica publicó Los emisarios; al año siguiente Editorial Cátedra publicó Crónica vieja y alabanza del reino, y recibió en México el premio de crítica Los Abriles por su libro Los emisarios. En 1986 Mutis irrumpió en el mundo de las letras con su primera gran novela: La nieve del almirante, primer volumen de la serie Empresas y tribulaciones de Maqroll el Gaviero; en 1989 obtuvo por esa novela el premio Médicis al mejor libro traducido al francés. También en 1986, El Equilibrista de México publicó Un homenaje y siete nocturnos.
En 1987 apareció la segunda obra de la saga: Ilona llega con la lluvia, que le valió la Orden del Águila Azteca. En 1988 la Universidad del Valle le concedió el grado de doctor honoris causa en letras, y recibió el premio Xavier Villaurrutia. La revista literaria Gradiva, dirigida por su hijo Santiago Mutis Durán, editó el libro Tras las rutas de Maqroll el Gaviero, que reúne los más importantes estudios críticos sobre la obra de Álvaro Mutis, algunas entrevistas y una separata del relato La verdadera historia del flautista de Hamelin.
La tercera obra de la serie de Maqroll, Un bel morir, apareció en 1989; publicó también La última escala del Tramp Steamer. El gobierno francés le otorgó la Orden de las Artes y las Letras en el grado de caballero. En 1990 se editó al mismo tiempo en Colombia y España la novela Amirbar; el gobierno italiano le concedió el premio Nonino al mejor libro extranjero publicado en Italia y dio a conocer otro volumen deEmpresas y tribulacionesAbdul Basuhr, soñador de navíos.
En 1993, con motivo de sus setenta años, se organizó una semana de homenaje a Álvaro Mutis; entre los actos más conmovedores estuvo el recital que dio en el Auditorio León de Greiff de la Universidad Nacional, al cual asistieron más de seis mil personas; además, la Universidad de Antioquia le concedió el grado de doctorhonoris causa en literatura y el gobierno colombiano le otorgó la Cruz de Boyacá, en una cena de gala en la Casa de Nariño. El reconocimiento nacional se vio refrendado por una serie de premios internacionales de suma importancia. Así, en el año 1997 fue galardonado con el Premio Cavour, en Italia, y con el Príncipe de Asturias, en España, y en 2001 se hizo con el máximo galardón de las letras castellanas, el Premio Cervantes. A su serie de obras sobre Maqroll añadió una nueva publicación:Contextos para Maqroll (1997).
Fuente: http://www.biografiasyvidas.com/biografia/m/mutis_alvaro.htm

sábado, 23 de julio de 2016

Biografia de Octavio Paz




Poeta y ensayista mexicano 





Nació el 31 de marzo de 1914 en Mixcoac (México) cuando el país se encuentra en plena lucha revolucionaria.

Su padre, al igual que su abuelo escribían, además de dedicarse al periodismo y a la política. Estas influencias hicieron que se volcara a la política además de la escritura.

Cuando cuenta 17 años funda la revista Barandal. En 1933 apareció su primer libro, que también se llamaba Barandal y fundó Cuadernos del Valle de México.

Conoció a los poetas T. S. Eliot y Paul Valéry. En 1937 se trasladó a Yucatán para impartir clases en el campo, y algún tiempo después se casó con Elena Garro, con quien asistió ese mismo año al Congreso de Escritores Antifascistas en Valencia (España). Allí se publicó Bajo tu clara sombra (1937), y conoció a los intelectuales de la República Española y al poeta chileno Pablo Neruda.

Al regresar a su país se acercó a Jorge Cuesta y Xavier Villaurrutia y publicó ¡No pasarán! y Raíz de hombre. Con Efraín Huerta y Rafael Solana, entre otros, fundó, en 1938, la revista Taller, en la que participaron los escritores españoles de su generación exiliados en México. En 1939 apareció A la orilla del mundo y Noche de resurrecciones. En 1942, a instancias de José Bergamín, dio una conferencia, "Poesía de soledad, poesía de comunión", en la que establecía su diferencia con la generación anterior, y trataba de conciliar en una sola voz las poéticas de Xavier Villaurrutia y Pablo Neruda.

En 1944 con la beca Guggenheim permaneció durante un año en Estados Unidos. En 1945 entró al Servicio Exterior Mexicano y fue trasladado a París. A través del poeta surrealista Benjamín Péretconoció a André Breton, además se relaciona con Albert Camus y otros intelectuales europeos e hispanoamericanos del París de la posguerra. Esta estancia definirá con precisión sus posiciones culturales y políticas; se alejó del marxismo y se acercó al surrealismo, empezando a interesarse por los temas más diversos.

Durante la década de 1950 publicó cuatro libros fundamentales: El laberinto de la soledad (1950) retrato personal en el espejo de la sociedad mexicana; El arco y la lira (1956), su esfuerzo más riguroso por elaborar una poética; ¿Águila o sol?, libro de prosa de influencia surrealista; y Libertad bajo palabra. En 1951 viajó a la India y en 1952 a Japón, sitios de los que recibió una gran influencia. Regresó a México en 1953 donde hasta 1959 desarrolló una intensa labor literaria. En 1960 volvió a París y en 1962 a la India, como funcionario de la embajada de México. Conoció aMarie José Tramini, con la que contrajo matrimonio en 1964. Publicó los libros de poemasSalamandra (1961), anterior a su viaje a la India, y Ladera este, que recoge su producción en ese país, y que incluye su segundo poema largo, Blanco.

En 1963 le otorgaron el Gran Premio Internacional de Poesía. Publicó los libros de ensayoCuadrivio en 1965, cuatro ensayos sobre Luis CernudaFernando PessoaRamón López Velarde yRubén DaríoPuertas al campo en 1966 y Corriente alterna, en 1967. En 1968 dimitió de su puesto de embajador en la India debido a los asesinatos cometidos por el Gobierno de México, el 2 de octubre de ese año, cuando cargó el Ejército contra manifestantes universitarios, y en 1971 fundó en su país la revista Plural, en la que colaboraron algunos de los escritores más importantes de la generación posterior. Ese año publicó El mono gramático, poema en prosa en el que se funden reflexiones filosóficas, poéticas y amorosas, y en 1974 Los hijos del limo, recapitulación de la poesía moderna; en 1975, Pasado en claro, otro de sus grandes poemas largos, recogido al año siguiente en Vuelta, libro con el que obtuvo el Premio de la Crítica en España. En 1977 dejó Plural e inició la revista Vuelta de la que fue director. El ogro filantrópico, continuación de sus reflexiones políticas, se publica en 1979, y en 1981 logró el Premio Cervantes. En 1982 se editó Sor Juana Inés de la Cruz o las trampas de la fe, retrato de la monja mexicana y la sociedad mexicana del siglo XVII; en 1987, Árbol adentro, último volumen de poesía.

En 1990 ganó el Premio Nobel de Literatura, y publicó La otra voz y Poesía de fin de siglo. En 1993,La llama doble y Amor y erotismo, y en 1995 Vislumbres de la India. Octavio Paz falleció el 19 de abril de 1998 víctima de un cáncer, en la misma ciudad que lo vio nacer. 


BIBLIOGRAFÍA 

Poesía 

Luna silvestre. México: Fábula, 1933. 
¡No pasarán! México: Simbad, 1936. 
Raíz del hombre. México: Simbad, 1937. 
Bajo tu clara sombra y otros poemas sobre España. Valencia: Ediciones Españolas, 1937. 
Entre la piedra y la flor. México: Nueva Voz, 1941. 
A la orilla del mundo. México: ARS, 1942. 
Libertad bajo palabra. México: Fondo de Cultura Económica, 1949. 
Semillas para un himno. México: Fondo de Cultura Económica, 1954. 
Piedra de sol. México: Fondo de Cultura Económica, 1957. 
La estación violenta. México: Fondo de Cultura Económica, 1958. 
Salamandra (1958-1961). México: Joaquín Mortiz, 1962. 
Viento entero. Delhi: The Caxton Press, 1965. 
Blanco. México: Joaquin Mortiz, 1967. 
Discos visuales. México: Ediciones ERA, 1968 (Arte de Vicente Rojo). 
Ladera Este (1962-1968). México: Joaquín Mortiz, 1969. 
La centena (1935-1968). Barcelona: Barral, 1969. 
Topoemas. México: Ediciones ERA, 1971. 
Renga. México: Joaquín Mortiz, 1972. Poema colectivo con Jacques Roubaud, Edoardo Sanguinetti y Charles Tomlinson. 
Pasado en claro. México: Fondo de Cultura Económica, 1975. 
Vuelta. Barcelona: Seix Barral, 1976. 
Hijos del aire/Airborn. Con Charles Tomlinson. México: Martín Pescador, 1979. 
Poemas (1935-1975). Barcelona: Seix Barral, 1979. 
Prueba del nueve. México: Círculo de Lectores, 1985. 
Árbol adentro (1976-1987). Barcelona: Seix Barral, 1987. 
Lo mejor de Octavio Paz. El fuego de cada día. Selección, prólogo y notas del autor. Barcelona: Seix Barral, 1989.

Prosa poética 

Águila o sol? México: Fondo de Cultura Económica, 1951. 
El mono gramático. Barcelona: Seix Barral, 1974.

Teatro 

La hija de Rappaccini. México: en la Revista Mexicana de Literatura , 7, septiembre-octubre 1956, y en Poemas, 1979.

Ensayos 

El laberinto de la soledad. México: Cuadernos Americanos, 1950. Segunda edición, Fondo de Cultura Económica, 1959. 
El arco y la lira. México: Fondo de Cultura Económica, 1956. 
Las peras del olmo. México: UNAM, 1957 
Cuadrivio. México: Joaquín Mortiz, 1965. 
Los signos en rotación. Buenos Aires: Sur, 1965. 
Puertas al campo. México: UNAM, 1966. 
Claude Lévi-Strauss o el nuevo festín de Esopo. México: Joaquín Mortiz, 1967. 
Corriente alterna. México: Siglo XXI, 1967. 
Marcel Duchamp o el castillo de la pureza. México: Ediciones ERA, 1968. Incluido después en Apariencia desnuda; la obra de Marcel Duchamp. México: Ediciones ERA 1973. 
Conjunciones y disyunciones. México: Joaquín Mortiz, 1969. 
México: la última década. Austin: Institute of Latin American Studies, University of Texas, 1969. 
Posdata. México: Siglo XXI, 1970. 
Las cosas en su sitio: sobre la literatura española del siglo XX. Con Juan Marichal. México: Finisterre, 1971. 
Los signos en rotación y otros ensayos. Introducción y edición de Carlos Fuentes. Madrid: Alianza Editorial, 1971. 
Traducción: literatura y literalidad. Barcelona: Tusquets Editores, 1971. 
El signo y el garabato. México: Joaquín Mortiz, 1973. 
Solo a dos voces. Con Julián Rios. Barcelona: Lumen, 1973. 
Teatro de signos/Transparencias. Edición de Julián Rios. Madrid: Fundamentos, 1974. 
La búsqueda del comienzo. Madrid: Fundamentos, 1974. 
Los hijos del limo: del romanticismo a la vanguardia. Barcelona Seix Barral, 1974. 
Xavier Villaurrutia en persona y en obra. México: Fondo de Cultura Económica 1978. 
El ogro filantrópico: historia y política (1971-1978). México: Joaquín Mortiz, 1979. 
In/mediaciones. Barcelona: Seix Barral, 1979. 
México en la obra de Octavio Paz. Editado y con una introducción de Luis Mario Schneider. México: Promociones Editoriales Mexicanas, 1979. 
Sor Juana Inés de la Cruz o las trampas de la fe. México: Fondo de Cultura Económica 1982, y Barcelona: Seix Barral, 1982. 
Tiempo nublado. Barcelona: Seix Barral, 1983. 
Sombras de obras. Barcelona: Seix Barral, 1983. 
Hombres en su siglo y otros ensayos. Barcelona: Seix Barral, 1984. 
Pasión crítica: conversaciones con Octavio Paz. Edición de Hugo J. Verani. Barcelona Seix Barral, 1985. 
México en la obra de Octavio Paz (3 volúmenes) 
-Vol. I. El peregrino en su patria. Historia y política de México. 
-Vol. II. Generaciones y semblanzas. Escritores y letras de México. 
-Vol. III. Los privilegios de la vista. Arte de México. 
Edición de Luis Mario Schneider y Octavio Paz. México: Fondo de Cultura Económica, 1987. 
Primeras Letras (1931-1943). Edición e introducción de Enrico Mario Santí;. Barcelona: Seix Barral, 1988, y México: Vuelta, 1988. 
Poesía, mito, revolución. Precedido por los discursos de Francois Mitterrand, Alain Peyrefitte, Pierre Godefroy. Premio Alexis de Tocqueville. México: Vuelta, 1989. 
La otra voz . Poesía y fin de siglo. Barcelona: Seix Barral, 1990.

Traducciones y ediciones de Octavio Paz 

Anthologie de la poésie mexicaine. Edición e introducción de Octavio Paz con una nota de Paul Claudel. Paris: Editions Nagel (Col. UNESCO), 1952. 
Anthology of Mexican Poetry. Edición e introducción de Octavio Paz con una nota de C. M. Bowra, y traducción al inglés de Samuel Beckett. Bloomington: Indiana University Press, 1958. 
Basho, Matsuo. Sendas de Oku. Traducido por Eikichi Hayashiya y Octavio Paz, con una introducción de Octavio Paz. México: UNAM, 1957, y Seix Barral, 1970. 
Laurel: Antología de la poesía moderna en lengua española. Edición de Xavier Villaurrutia, Emilio Prados, Juan Gil-Albert y Octavio Paz. México: Editorial Séneca, 1941. 
Pessoa, Fernando. Antología. Edición, traducción e introducción de Octavio Paz. México: UNAM, 1962. 
Poesía en movimiento ( México: 1915-1966). Edición de Octavio Paz, Alí Chumacero, Homero Aridjis y José Emilio Pacheco. México: Siglo XXI, 1966. 
Versiones y diversiones. Traducciones de poesía. México: Joaquín Mortiz, 1974. 

Entre irse y quedarse 

Entre irse y quedarse duda el día, 
enamorado de su transparencia. 
La tarde circular es ya bahía: 
en su quieto vaivén se mece el mundo.

Todo es visible y todo es elusivo, 
todo está cerca y todo es intocable.

Los papeles, el libro, el vaso, el lápiz 
reposan a la sombra de sus nombres.

Latir del tiempo que en mi sien repite 
la misma terca sílaba de sangre.

La luz hace del muro indiferente 
un espectral teatro de reflejos.

En el centro de un ojo me descubro; 
no me mira, me miro en su mirada.

Se disipa el instante. Sin moverme, 
yo me quedo y me voy: soy una pausa.

FUENTE: http://www.buscabiografias.com/biografia/verDetalle/1624/Octavio%20Paz




domingo, 17 de julio de 2016

Biografia de Albert Camus

(Mondovi, Argelia, 1913 - Villeblerin, Francia, 1960) Novelista, dramaturgo y ensayista francés. Nacido en el seno de una modesta familia de emigrantes franceses, su infancia y gran parte de su juventud transcurrieron en Argelia. Inteligente y disciplinado, empezó estudios de filosofía en la Universidad de Argel, que no pudo concluir debido a que enfermó de tuberculosis.

Formó entonces una compañía de teatro de aficionados que representaba obras clásicas ante un auditorio integrado por trabajadores. Luego ejerció como periodista durante un corto período de tiempo en un diario de la capital argelina, mientras viajaba intensamente por Europa. En 1939 publicó Bodas, conjunto de artículos que incluyen numerosas reflexiones inspiradas en sus lecturas y viajes. En 1940 marchó a París, donde pronto encontró trabajo como redactor en Paris-Soir.
Empezó a ser conocido en 1942, cuando se publicaron su novela corta El extranjero, ambientada en Argelia, y el ensayo El mito de Sísifo, obras que se complementan y que reflejan la influencia que sobre él tuvo el existencialismo. Tal influjo se materializa en una visión del destino humano como absurdo, y su mejor exponente quizá sea el «extranjero» de su novela, incapaz de participar en las pasiones de los hombres y que vive incluso su propia desgracia desde una indiferencia absoluta, la misma, según Camus, que marca la naturaleza y el mundo.
Sin embargo, durante la Segunda Guerra Mundial se implicó en los acontecimientos del momento: militó en la Resistencia y fue uno de los fundadores del periódico clandestino Combat, y de 1945 a 1947, su director y editorialista. Sus primeras obras de teatro, El malentendido y Calígula, prolongan esta línea de pensamiento que tanto debe al existencialismo, mientras los problemas que había planteado la guerra le inspiraron Cartas a un amigo alemán.
Su novela La peste (1947) supone un cierto cambio en su pensamiento: la idea de la solidaridad y la capacidad de resistencia humana frente a la tragedia de vivir se impone a la noción del absurdo. La peste es a la vez una obra realista y alegórica, una reconstrucción mítica de los sentimientos del hombre europeo de la posguerra, de sus terrores más agobiantes. El autor precisó su nueva perspectiva en otros escritos, como el ensayo El hombre en rebeldía (1951) y en relatos breves como La caída y El exilio y el reino, obras en que orientó su moral de la rebeldía hacia un ideal que salvara los más altos valores morales y espirituales, cuya necesidad le parece tanto más evidente cuanto mayor es su convicción del absurdo del mundo.
Si la concepción del mundo lo emparenta con el existencialismo de Jean-Paul Sartrey su definición del hombre como «pasión inútil», las relaciones entre ambos estuvieron marcadas por una agria polémica. Mientras Sartre lo acusaba de independencia de criterio, de estirilidad y de ineficacia, Camus tachaba de inmoral la vinculación política de aquél con el comunismo.
De gran interés es también su serie de crónicas periodísticas Actuelles. Tradujo al francés La devoción de la cruz, de Calderón, y El caballero de Olmedo, de Lope de Vega. En 1963 se publicaron, con el título de Cuadernos, sus notas de diario escritas entre 1935 y 1942. Galardonado en 1957 con el Premio Nobel de Literatura, falleció en un accidente de automóvil.
Fuente: http://www.biografiasyvidas.com/biografia/c/camus.htm

lunes, 4 de julio de 2016

Biografia de Ernest Hemingway

(Ernest Miller Hemingway; Oak Park, 1899 - Ketchum, 1961) 

Narrador estadounidense cuya obra, considerada ya clásica en la literatura del siglo XX, ha ejercido una notable influencia tanto por la sobriedad de su estilo como por los elementos trágicos y el retrato de una época que representa. Recibió el premio Nobel en 1954.
Ya se había iniciado en el periodismo cuando se alistó como voluntario en la Primera Guerra Mundial, como conductor de ambulancias, hasta que fue herido de gravedad. De vuelta a Estados Unidos retomó el periodismo hasta que se trasladó a París, donde alternó con las vanguardias y conoció a E. Pound, Pablo Picasso, J. Joyce y G. Stein, entre otros. Participó en la Guerra Civil Española y en la Segunda Guerra Mundial como corresponsal, experiencias que luego incorporaría a sus relatos y novelas.
Él mismo declaró que su labor como periodista lo había influido incluso estéticamente, pues lo obligó a escribir frases directas, cortas y duras, excluyendo todo lo que no fuera significativo. Su propio periodismo, por otra parte, también influyó en el reportaje y las crónicas de los corresponsales futuros.
Entre sus primeros libros se encuentran Tres relatos y diez poemas (1923), En nuestro tiempo (1924) y Hombres sin mujeres (1927), que incluye el antológico cuento "Los asesinos". Ya en este cuento es visible el estilo de narrar que lo haría famoso y maestro de varias generaciones. El relato se sustenta en diálogos cortos que van creando un suspense invisible, como si lo que sucediera estuviera oculto o velado por la realidad. El autor explicaba su técnica con el modelo del témpano de hielo, que oculta la mayor parte de su materia bajo el agua, dejando visible sólo una pequeña parte a la luz del día.
Otros cuentos de parecida factura también son antológicos, como "Un lugar limpio y bien iluminado", "La breve vida feliz de Francis Macomber", "Las nieves del Kilimanjaro", "Colinas como elefantes blancos", "Un gato bajo la lluvia" y muchos más. En algunas de sus mejores historias hay un vago elemento simbólico sobre el que gira el relato, como una metáfora que se desarrolla en el plano de la realidad.
La mayor parte de su obra plantea a un héroe enfrentado a la muerte y que cumple una suerte de código de honor; de ahí que sean matones, toreros, boxeadores, soldados, cazadores y otros seres sometidos a presión. Tal vez su obra debe ser comprendida como una especie de romanticismo moderno, que aúna el sentido del honor, la acción, el amor, el escepticismo y la nostalgia como sus vectores principales. Sus relatos inauguran un nuevo tipo de "realismo" que, aunque tiene sus raíces en el cuento norteamericano del siglo XIX, lo transforma hacia una cotidianidad dura y a la vez poética, que influiría en grandes narradores posteriores como R. Carver.
Uno de los personajes de Hemingway expresa: "El hombre puede ser destruido, pero no derrotado". Y uno de sus críticos corrobora: "Es un código que relaciona al hombre con la muerte, que le enseña cómo morir, ya que la vida es una tragedia. Pero sus héroes no aman mórbidamente la muerte, sino que constituyen una exaltación solitaria de la vida, y a veces sus muertes constituyen la salvaguarda de otras vidas". A este tipo de héroe suele contraponer Hemingway una especie de antihéroe, como su conocido personaje Nick Adams, basado en su propia juventud, y que hilvana buena parte de los relatos como una línea casi novelesca.
Sus novelas tal vez sean más populares aunque menos perfectas estilísticamente que los cuentos. Sin embargo, Fiesta (1926) puede ser considerada una excepción; en ella se cuenta la historia de un grupo de norteamericanos y británicos, integrantes de la llamada "generación perdida", que vagan sin rumbo fijo por España y Francia. En 1929 publicó Adiós a las armas, historia sentimental y bélica que se desarrolla en Italia durante la guerra. En Tener y no tener (1937), condena las injusticias económicas y sociales. En 1940 publicó Por quién doblan las campanas, basada en la Guerra Civil española. Esta obra fue un éxito de ventas y se llevó a la pantalla.
En 1952 dio a conocer El viejo y el mar, que tiene como protagonista a un modesto pescador de La Habana, donde vivió y escribió durante muchos años enfrentado a la naturaleza. Algunos críticos han visto en este texto la culminación de su obra, porque en él confluyen el humanismo y la economía artística; otros, sin embargo, opinan que éste no es el mejor Hemingway, por una cierta pretensión didáctica. Hacia el final de una vida aventurera, cansado y enfermo, se suicidó como lo haría alguno de sus personajes, disparándose con una escopeta de caza. Para muchos, es uno de los escasos autores míticos de la literatura contemporánea.

Fuentehttp://www.biografiasyvidas.com/biografia/h/hemingway.htm